Con las vísperas de esta tarde celebramos la Solemnidad del glorioso patriarca
San José. En ella, le damos gracias por aceptar formar parte de la historia de
la salvación. Él, como María, dijo “sí” a los planes que Dios le presentaba con la
fe que brota de un corazón humilde, orante y sencillo.
A él le rogamos que vele por todas las familias, tan acosadas por nuestra sociedad por todo tipo de violencias y voces sin valores que intentan romper su amor y unión. Por los padres de familia, para que les de la fuerza y sabiduría para saber obrar siempre según lo mejor para sus hijos y no les falte un trabajo digno que cubra sus necesidades.
Y también le pedimos por nuestros seminarios y fraternidades, que no falten en ellos jóvenes generos@s decidid@s a seguir anunciando con sus testimonio y oración la Buena Nueva del Evangelio: El amor de Dios a la humanidad.
A él le rogamos que vele por todas las familias, tan acosadas por nuestra sociedad por todo tipo de violencias y voces sin valores que intentan romper su amor y unión. Por los padres de familia, para que les de la fuerza y sabiduría para saber obrar siempre según lo mejor para sus hijos y no les falte un trabajo digno que cubra sus necesidades.
Y también le pedimos por nuestros seminarios y fraternidades, que no falten en ellos jóvenes generos@s decidid@s a seguir anunciando con sus testimonio y oración la Buena Nueva del Evangelio: El amor de Dios a la humanidad.
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